El papel de las energías renovables en el desarrollo sostenible de las islas

Una isla sostenible puede ser el ejemplo que se extienda desde pequeños estados insulares a todo el mundo para acercarnos más al desarrollo sostenible
Wind energy on Global Wind Day

Los grandes cambios pueden tener lugar en los lugares más inesperados. O en los más pequeños. Los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) apenas representan el 1% tanto del PIB mundial como de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Sin embargo, las pequeñas islas están a la cabeza en muchas medidas relacionadas con la acción climática y son referentes en algunas medidas para el desarrollo sostenible. Frente a las grandes islas de basura en los océanos, también encontramos estados insulares en desarrollo que apuestan por la sostenibilidad.

Así lo afirma un informe de la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA, por sus siglas en inglés) de este mismo año. Documento que destaca el crecimiento que han tenido las energías renovables en los estados insulares en los últimos tiempos. 

 

Las islas y la energía renovable

Las islas están teniendo un fuerte impulso en la transición energética apoyando las energías renovables. Estas porciones de tierra rodeadas de agua están aprovechando sus características geográficas para implementar las energías renovables y acelerar su desarrollo sostenible.

La energía hidroeléctrica, por ejemplo, se puede desarrollar en islas montañosas en las que llueva a menudo (que tengan una gran cantidad de precipitaciones). Los biocombustibles derivados de los aceites de coco, palma o sorgo dulce permitirían prosperar a las economías locales y reducirían la dependencia de las importaciones de combustibles fósiles, ayudando a que la isla sea sostenible. Además, la energía del océano derivada de la acción de las mareas, las olas o las algas –pese estar aún en una fase de desarrollo temprana– puede aportar grandes beneficios para los PEID.

La capacidad instalada total de energías renovables en todos los PEID representó alrededor de 5,3 GW a finales de 2019, de los cuales 665 MW se instalaron en el último año. Lo que representa un crecimiento del 14,4%, el doble del crecimiento mundial del 7,6%, durante el mismo período.

 

Las energías renovables y el desarrollo sostenible de las islas

Según IRENA, además de los datos que aportan los socios de la iniciativa SIDS Lighthouses, The Clinton Foundation y Greening the Islands, con el impulso que han tenido las energías renovables en estos territorios se ha contagiado a otros sectores que, en principio, nada tienen que ver con la energía: agricultura, salud, educación… Fomentado el desarrollo socioeconómico, la creación de empleo y la igualdad de género, entre otros aspectos relacionados con los objetivos de la Agenda 2030.

Se puede destacar como ejemplos de sostenibilidad la experiencia de Puerto Rico, Seychelles y Antigua y Barbuda.

 

La energía solar salva vidas: Puerto Rico

Hace cuatro años, el huracán María devastó Puerto Rico. La intensidad del huracán y el estado deteriorado de la infraestructura de la isla dieron lugar una devastadora crisis humanitaria. La incidencia del ser humano en el calentamiento global provoca que los fenómenos atmosféricos sean cada vez más violentos, dando lugar a desastres naturales como el huracán María. Los daños cortaron la electricidad e interrumpieron el acceso a la atención médica a millones de personas.

La organización sin ánimo de lucro Solar Saves Lives ha estado trabajando desde entonces para garantizar que los centros de salud sigan atendiendo a sus pacientes incluso si se cae la red eléctrica. ¿Cómo? Mediante la instalación de sistemas solares y de baterías en clínicas de salud comunitarias en todo Puerto Rico. Un ejemplo que ayuda a que la isla sea más sostenible. Estos centros de salud son parte de la Red de la Asociación de Atención Primaria de Puerto Rico, y se dedican a brindar servicios a quienes no tienen seguro o capacidad de pago. Muchas de estas clínicas se encuentran en áreas remotas y son la única fuente de atención médica para la población circundante.

En esta misma línea, el proyecto #50%conSOL busca que el 50% de la energía eléctrica que se consume en el país se produzca con el sol instalando paneles fotovoltaicos en los techos de hogares, comercios, empresas y edificios públicos.

 

La energía solar fomenta la educación: Seychelles

El 90% de las necesidades energéticas de Seychelles dependen del petróleo. Un combustible fósil que tienen que importar, por lo que tiene un coste económico significativo para el país, y que, además, es su principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero.

Sin embargo, Seychelles tiene un gran potencial para reemplazar parte de la electricidad generada por petróleo con sistemas de energía solar. La iniciativa de la Comisión de Energía de Seychelles prevé la instalación de paneles solares en todas las escuelas públicas ubicadas en las tres islas principales de Seychelles (Mahe, Praslin y La Digue).

Además de impulsar una parte considerable del sistema educativo del país, el proyecto tiene en mente objetivos socioeconómicos adicionales como la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero o la generación de interés por las energías renovables entre los niños que asisten a las escuelas, incluyendo futuras oportunidades laborales en el sector.

 

Antigua y Barbuda y la movilidad sostenible

El caso de Seychelles no es una excepción. El 90% del transporte en los PEID depende de los combustibles fósiles, según analiza IRENA. La importación de combustibles fósiles hace que los PEID sean vulnerables a las fluctuaciones internacionales de los precios del petróleo. Como solución, IRENA está desarrollando actualmente una hoja de ruta de movilidad eléctrica para Antigua y Barbuda. ¿El objetivo? Que el transporte en esta isla sea 100% ecológico para 2030.

 

Isla de Pascua, donde el futuro mira al sol

Esta isla ha estado al borde del colapso ambiental en varias ocasiones: históricamente la tala indiscriminada de árboles, la pesca ilegal, la creciente sobrepoblación de la isla, el turismo, el abandono de residuos y la contaminación ambiental la amenazan desde hace años.

Sin embargo, el futuro sostenible también se abre paso den la Isla de Pascua, que ya cuenta con su primera planta de energía fotovoltaica conectada a la red eléctrica de Rapa Nui y la primera que dotará a este lugar de electricidad procedente de energía renovable. Una planta solar que produce una media aproximada de 200 MWh al año, evitando la emisión directa de unas 135 toneladas anuales de CO₂.

 

Mallorca y el hidrógeno verde

En este sentido, la isla española Mallorca, situada en el mar mediterráneo, también acoge un proyecto que busca hacer más verde su transporte y su economía. Tan verde como lo es su protagonista: el hidrógeno verde.

ACCIONA ha dado un impulso al proyecto industrial Power to Green Hydrogen, con el que se pretende que este combustible tenga múltiples aplicaciones en la isla. Por ejemplo, en el suministro de combustible a flotas de autobuses y vehículos de alquiler de pila de combustible desde una estación de servicio “hidrogenera” construida a tal efecto, la generación de calor y energía para edificios comerciales y públicos o el suministro de energía auxiliar a ferris y operaciones portuarias. Se trata de una de las posibles funciones del hidrógeno verde, que puede tener múltiples utilidades como energía renovable.

Los recursos renovables de las islas sostenibles, como las energías eólica, solar y marina, tienden a ser buenos y accesibles. Como tal, estas islas son una plataforma ideal para poner a prueba nuevas tecnologías o implementar las que ya existen y, de esta manera, conseguir impulsar el desarrollo sostenible de estos territorios.