Día Mundial del Viento 2025: la energía que impulsa el cambio
En el Día Mundial del Viento, exploramos cómo la energía eólica se ha consolidado como una fuente renovable esencial para impulsar la transición energética. Descubre cómo este recurso natural contribuye al desarrollo de un futuro más limpio y sostenible.
Cada 15 de junio, conmemoramos el Día Mundial del Viento, una fecha dedicada a reconocer la importancia de este recurso natural en nuestras vidas y su papel transformador en el desarrollo sostenible. Desde una suave brisa hasta la fuerza de un huracán, el viento es una fuente renovable de energía limpia y un aliado crucial en la lucha contra el cambio climático.
¿Qué voy a leer en este artículo?
- Día Mundial del Viento 2025: ¿qué es y por qué se celebra?
- El viento, configurador de la historia de la humanidad
- La energía eólica en 2025: cifras, retos y oportunidades
Día Mundial del Viento 2025: ¿por qué lo celebramos?
Si hubiera que hacer un top 3 de los recursos que han ayudado al ser humano a desarrollarse como especie desde el principio de su existencia, seguramente habría pocas dudas en señalar el descubrimiento del fuego y a la invención de la rueda como dos de las claves principales.
Quizás habría más dudas en darle al viento el papel que sin duda se merece en la historia de la humanidad, tal vez porque hablamos de un recurso natural que no tuvimos que descubrir o inventar, simplemente ya estaba ahí ejerciendo su actividad desde antes de que empezáramos a caminar.
Sin embargo, la importancia del viento en las actividades humanas y su interacción en la biodiversidad del planeta es más que vital. En este contexto, el Día Mundial del Viento se convierte en una oportunidad para destacar su papel en la transformación del modelo energético, su contribución a la descarbonización y su potencial para generar empleo y crecimiento sostenible.
El viento, configurador de la historia de la humanidad
¿Qué le debemos al viento? Estos son solo algunos de los principales beneficios:
- Transporte de semillas: el viento juega un papel vital en la polinización de las especies vegetales a través del proceso por el cual las semillas son transportadas por el aire. Esta dispersión permite la biodiversidad y la regeneración de ecosistemas enteros, asegurando la supervivencia de innumerables especies de plantas y, por ende, de los animales que dependen de ellas.
- Desplazamiento de nubes: el viento es indispensable para dar continuidad al ciclo hidrológico, desplazando las nubes y facilitando la distribución del agua a través de lluvias. Este movimiento atmosférico asegura que regiones áridas reciban humedad y que los recursos hídricos se distribuyan de manera más equitativa, sosteniendo tanto a la agricultura como a las reservas de agua dulce.
- Funcionamiento de molinos: durante siglos, los molinos de viento han sido la base de la economía en muchas comunidades agrícolas. Utilizados para moler grano, bombear agua y realizar otras tareas mecánicas, esta invención fue la base que permitió el desarrollo de los aerogeneradores que, hoy en día, nos permiten disfrutar de energía renovable gracias al viento.
- Navegación marítima: el viento fue clave en la era de la exploración y descubrimiento del mundo. Sin la capacidad de captar y utilizar este recurso natural, las grandes expediciones marítimas que abrieron nuevas rutas comerciales y conexiones entre continentes no habrían sido posibles. Los veleros, impulsados por el viento, surcaron los océanos y facilitaron el intercambio de ideas, culturas y mercancías que han dado forma a nuestra historia global.
Desde tiempos ancestrales, ha sido una fuente de inspiración y utilidad para la humanidad. Los primeros navegantes se aventuraron a lo desconocido confiando en las corrientes de aire para impulsar sus velas. Hoy, siglos después, seguimos confiando en esta fuerza elemental, pero con una perspectiva moderna y sostenible que busca aprovechar su poder sin dañar el medio ambiente.
La energía eólica, clave en la transición energética
Según el Informe Global sobre Energía Eólica publicado en 2025 por el Consejo Global de Energía Eólica, en 2024 la energía eólica alcanzó un nuevo récord mundial con la instalación de 117 GW de capacidad adicional , consolidándose como una de las principales fuentes de energía renovable.
Este impulso elevó la capacidad eólica total instalada a nivel global a 1.136 GW, con 109 GW provenientes de proyectos terrestres y 8 GW de instalaciones marinas, distribuidos en 55 países.
Este avance permite que este tipo de energía limpia cubra aproximadamente el 8,1 % de la demanda eléctrica mundial, contribuyendo significativamente a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Además de ser una de las fuentes de energía más competitivas, la energía eólica se ha convertido en un motor de empleo. Según el informe Global Wind Workforce Outlook 2024–2028, se estima que se necesitarán más de 532.000 nuevos técnicos eólicos para satisfacer la creciente demanda de proyectos terrestres y marinos hasta 2028, siendo el 40 % de estos puestos cubiertos por nuevos profesionales.
A pesar de estos avances, el sector enfrenta desafíos como la necesidad de agilizar los procesos de permisos y mejorar las infraestructuras para integrar eficientemente la energía eólica en las redes eléctricas. En este contexto, compromisos globales como el asumido en la COP28, que busca triplicar la capacidad renovable para 2030, reafirman que la energía eólica es una herramienta esencial en la acción climática mundial.
En este Día Mundial del Viento 2025, reafirmamos nuestro compromiso con una transición energética sostenible, en la que la energía eólica desempeña un papel esencial en la construcción de un futuro más limpio, justo y resiliente para todos.
Fuente:
- https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2025-04-08/el-41-de-la-electricidad-mundial-se-genera-ya-con-fuentes-sin-emisiones-nueve-graficos-para-entender-la-transicion-energetica-global.html
- https://www.gwec.net/gwec-news/wind-industry-installs-record-capacity-in-2024-despite-policy-instability